La Navidad y el fin del año son un momento especial para fortalecer los lazos familiares. En cada hogar, la mesa se convierte en el centro de reunión, donde el amor y las tradiciones se sirven junto con los manjares típicos de cada región (asado, pionono salado, vitel toné, ensalada de frutas y empanadas).
La diversidad gastronómica de Argentina y Latinoamérica refleja su riqueza cultural, así como también la importancia de la unión familiar durante la Navidad. Cada plato, con sus sabores únicos, cuentan historias de amor, tradición y alegría, haciendo de esta época del año un momento verdaderamente especial.
La verdadera riqueza de la Navidad está en el acto de compartir, llevando una sonrisa y un plato de comida a quienes pasan dificultades.
Fortalecer los lazos comunitarios y extender nuestras mesas a los más vulnerables enriquecen nuestras tradiciones y espíritu, recordándonos que la esencia de estas fiestas es el amor y la solidaridad.
En Argentina, las llamadas FIESTAS, se celebran en pleno verano, que se refleja en las comidas frescas que adornan nu…
En mi caso, anécdotas miles: recuerdo esta leyenda…
Recuerdo, a mis 5 años, íbamos a San Antonio de Litín, de mis abuelos maternos, nos reuníamos con mis tíos, primos y los abuelos paternos. También estaba el suegro italiano de uno de mis tíos, don Pepe, un tano, que había tomado un poco demás.
Nos levantamos a brindar y allá fue el gringo con la silla de espaldas al piso de tierra, y la cabeza entre los rabanitos. Según él, lo habían empujado. Y buehhh… *
Qué lindo era que gritasen: “¡Vamos a apagar las luces, porque ya viene el Niño Dios!”.
Se hacía la luz y ¿a que no saben qué…? Aparecía un camión volcador Chevrolet C60 modelo 1970, amarillo, con caja volcadora roja, junto con unos chocolatines “Jack” de Fel-Fort, que lo fabricaban desde 1962.17:25:21