Saltar al contenido
Inicio » Historias Aeronáuticas: El Primer Dirigible que Surcó los Cielos Argentinos | COLUMNA

Historias Aeronáuticas: El Primer Dirigible que Surcó los Cielos Argentinos | COLUMNA

Compartir en redes

El 30 de diciembre de 1920, el cielo de Buenos Aires fue testigo de un hecho histórico: el primer vuelo del dirigible «El Plata», una aeronave que inauguró la etapa de los vuelos navales en Argentina. La hazaña, recordada por Ariel Baysre en su columna «La Mañana Informal», fue impulsada por el ingeniero Edmundo Gallo, quien comandó la nave junto a un consorcio italiano.

El dirigible, de origen italiano, fue construido en Roma para la Marina de su país y llegó a Argentina tras el final de la Primera Guerra Mundial. Con 60 metros de eslora, 18 metros de altura y 22 metros de diámetro, contaba con una capacidad para seis personas y estaba propulsado por motores Fiat de 120 HP que le permitían alcanzar los 90 km/h y una altitud de 400 metros.

El vuelo inaugural, que despegó con hidrógeno como gas de sustentación, sobrevoló el Río de la Plata y la Plaza de Mayo durante una hora y diez minutos, marcando un hito en la aviación nacional. Gallo, al mando de la tripulación, demostró la viabilidad de estas aeronaves en el espacio aéreo local.

Renombrado oficialmente como «El Plata» en 1921, este dirigible semi-rígido de 3000 metros cúbicos se convirtió en el precursor de la aeronáutica naval argentina, sentando las bases para el desarrollo de futuras experiencias en transporte aéreo militar y civil. Su legado perdura como un símbolo pionero de la innovación tecnológica en la historia aeronáutica del país.


Compartir en redes