El proyecto se aprobó por unanimidad, con 59 votos, este jueves y se envió a la Cámara de Diputados. Declara la emergencia por 180 días.
El Senado aprobó este jueves por unanimidad y giró a la Cámara de Diputados un proyecto que declara «zona de desastre y de emergencia económica, social y productiva» al departamento de Cushamen, en Chubut, de la zona de El Bolsón, en Río Negro, por los incendios forestales de los últimos días.
Por acuerdo de todas las bancadas, el proyecto aprobado con 59 votos fue incorporado como último punto del temario y se votó al final de una sesión sin sobresaltos que, en este tema en particular, tuvo algunos reproches cruzados entre integrantes del oficialismo y de la oposición.
El proyecto declara la emergencia por 180 días, un período prorrogable por otro plazo igual, según explicó el senador chubutense Alfredo Luenzo (Frente de Todos), impulsor de la iniciativa.
Tras resaltar que los graves incendios en la zona afectaron a miles de personas que perdieron sus viviendas y todas sus pertenencias, Luenzo indicó que «se va a duplicar por un mes el monto de las asignaciones universales por hijo, por embarazo y también el valor del seguro de desempleo».
«Estas medidas representan una erogación para el Gobierno nacional superior a los 52 millones de pesos», agregó el senador, quien sostuvo que esas medidas fueron dispuestas por el Poder Ejecutivo y que el proyecto apuesta a «consolidarlas por 180 días».
Al respecto, explicó que se propone «la asistencia financiera especial para las actividades económicas de las zonas afectadas, con tasas de interés bonificadas en un 45%» y «la suspensión de hasta 90 días de la iniciación de juicios administrativos por cobros de acreencias», entre otros puntos.
Seguidamente, la presidenta de la Comisión de Ambiente, Gladys González (Juntos por el Cambio) anticipó el acompañamiento de esa bancada y explicó: «No estamos hablando solamente de bosques nativos y de plantaciones, sino de las viviendas de más de 1.300 familias, viviendas desde los cimientos, perdieron literalmente todo, se quedaron sin nada».
La senadora por Buenos Aires contó que días atrás se acercó a la zona afectada por los incendios y advirtió que vio «mucho desorden», tras lo cual pidió «al Gobierno nacional, los gobiernos provinciales y municipales que ordenen la ayuda».
En este sentido, indicó que «hay familias construyendo en tierras que no son firmes, lo que puede generar mayores problemas» a futuro y remarcó: «Hace mucha falta que esté el Estado ordenando».
«Esta es la manera de responder de forma unánime a una emergencia, pero es algo coyuntural, entonces volvemos a pedir soluciones estructurales», agregó González.
No obstante, el debate fue subiendo el tono cuando el salteño Juan Carlos Romero (Interbloque Federal) sostuvo que en el proyecto hay «una enorme omisión» en cuando al tema «seguridad, porque se advierte en Chubut y sobre todo en Río Negro que se ha instalado una violencia, con ocupación de tierras, ataques apersonas, quemas».
Romero afirmó que «hay grandes posibilidades de que los incendios hayan sido causados intencionalmente» y evaluó que «desde la Nación hay una tolerancia enorme en proteger a los grupos violentos».
«Me llama la atención esa actitud frente a la violencia de quienes se dicen mapuches, porque me consta que la gran mayoría de nuestros hermanos mapuches viven pacíficamente», disparó el senador y consideró que los gobiernos provinciales «no están teniendo control de su territorio» y «la Nación está tolerando la toma de parque nacionales, discursos de armas, amenazas».
Varios senadores cuestionaron las expresiones de Romero, entre ellos el ex gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck (Juntos somos Río Negro, quien indicó: «No estoy de acuerdo en que se incorpore la seguridad en esta declaración de emergencia».
«La emergencia contempla facultades extraordinarias delegadas, y en el tema seguridad no estoy de acuerdo en lo conceptual por tantas cosas que han pasado en nuestro país», sostuvo Weretilneck.
Por su parte, la chubutense Nancy González (Frente de Todos) lo cruzó directamente a Romero y afirmó: «No voy a permitir que digan que los pueblos originarios son los causantes de estos incendios. No son violentos».